Elección y preparación del sustrato
Elección y preparación del sustrato
Como ya se ha comentado, cuando instalamos un huerto, uno de los objetivos fundamentales es conseguir un sustrato nutritivo, esponjoso, que retenga el agua sin encharcarse.
Existen muchos productos que sirven para mejorar las propiedades de un terreno agrícola o un jardín. Pero en el caso de un huerto escolar de mediana superficie, lo más sencillo y económico para preparar y mejorar el sustrato es emplear arena, tierra vegetal y mantillo.
Veamos varios casos habituales:
- El terreno en el que instalamos el huerto es de por sí buena calidad; bastará con aportar anualmente mantillo labrando y mezclándolo con el sustrato. La cantidad de mantillo rondará los 5 centímetros de altura de mantillo sobre la zona a cultivar (esto es, un metro cúbico de mantillo para 20 metros cuadrados de huerto). Hay que tener en cuenta que los huertos son sistemas productivos que consumen muchos nutrientes pues las verduras crecen muy rápido y su biomasa se retira para ser consumida. Esto hace que no se cierren los ciclos de materia y energía en el huerto y que haya que aportar muchos insumos externos de nutrientes.
- Para el caso de terrenos con huertos que funcionan desde hace tiempo, se suele hacer un aporte de mantillo fuerte en el otoño y otro más suave en primavera. Y si se desea ir mejorando la estructura del sustrato, se puede mezclar este mantillo con algo de tierra vegetal.
- En el caso de disponer de un terreno que se encharque o se compacte mucho, se deberá añadir además de abono, arena de río, que facilitará el drenaje y la aireación. El aporte de mantillo o de abono de origen vegetal también hará que el terreno quede más esponjoso.
- En terrenos donde apenas hay sustrato, habrá que aportar tierra vegetal, arena y mantillo. Sirva como modelo la siguiente medida: en una zona en la que no hay sustrato y hay que generar un terreno nuevo para el huerto, se puede pedir a un proveedor que nos prepare una mezcla con una tercera parte de tierra vegetal, otra tercera parte con mantillo y una última con arena de río. En principio esta combinación permitirá el cultivo de la mayoría de las hortalizas.
- En huertos en terrazas, mesas de cultivo o situaciones similares en las que no hay sustrato, se recomienda emplear mezclas de sustratos ligeros, que aporten a un tiempo capacidad de retención de agua, drenaje, nutrientes y generen un terreno mullido. Se puede recurrir a lo que muchos proveedores llaman sustrato universal, (2/3 partes) y añadirle nutrientes a base de mantillo (1/3 parte) o bien mezclar turba o fibra de coco (2/3 partes) con humus de lombriz (1/3 parte).
SUSTRATOS PARA HUERTOS MEDIANOS A GRANDES. SOBRE TIERRA, ARENA, ETC.
SUSTRATO Y CARACTERÍSTICAS
Arena de río.
- Grano de entre 0.063 y 2 mm de diámetro.
- Apenas retiene el agua. Se usa para aumentar el drenaje en sustratos que se encharcan y para que no se compacte mucho el terreno.
- No aporta nutrientes a las plantas.
- Se emplea para superficies grandes.
Tierra franca.
- Es una tierra apta para el cultivo, que posee una mezcla equilibrada de arena, arcilla y limo (sedimento con un grano menor que las arcillas).
- En función de su mayor o menor proporción de arena o arcilla, se llama tierra franca arenosa o tierra franca arcillosa.
- Aporta algunos (pocos) nutrientes a las plantas.
- Se puede emplear para corregir las características del terreno, usando una tierra franca más arenosa o más arcillosa.
- Se emplea para superficies grandes.
Tierra vegetal (o tierra de cabecera).
- Se suele hablar de tierra vegetal para denominar a una tierra franca proveniente de antiguas zonas de cultivo o huerta, que es apta para el cultivo y que por poseer bastante materia orgánica, aporta nutrientes a las plantas.
- Cuando instalamos un huerto, es en general el sustrato base sobre el que trabajaremos.
Se emplea para superficies grandes. - Se emplea para superficies grandes.
Mantillo.
- Habitualmente se habla de mantillo para referirse al estiércol fermentado y cribado, aunque a veces el mantillo es de origen totalmente vegetal.
- Tiene una alta capacidad para retener el agua.
- Aporta esponjosidad al terreno.
- Aporta muchos nutrientes a las plantas, sobre todo nitrógeno.
- Es necesario que esté bien compostado (fermentado), pues de lo contrario puede provocar problemas en muchas plantas.
Arcilla.
- Grano de menos de 0,002 mm.
- Retiene mucho el agua.
- Apenas aporta nutrientes a las plantas.
- Favorece la compactación del terreno.
- Si se desea aumentar la retención de un huerto escolar, no se añade arcilla directamente, sino tierra franca con una alta proporción de arcilla.
SUSTRATOS EMPLEADOS EN HUERTOS PEQUEÑOS EN TERRAZAS. SOBRE SOLADOS, MESAS DE CULTIVO, ETC.
SUSTRATO Y CARACTERÍSTICAS
Humus.
- El humus es materia orgánica de origen vegetal con un alto grado de descomposición.
- Aporta muchos nutrientes.
- Tiene una alta capacidad de retención de agua.
- Evita la compactación del terreno.
Turba.
- La turba es el producto de la descomposición de materia orgánica en zonas húmedas.
- Es un sustrato muy esponjoso, que evita la compactación y absorbe el agua dejándola a disposición de las raíces.
- Su ligereza la hacen adecuada para huertos en terrazas o sobre solados.
- No se debe abusar del empleo de la turba, pues su extracción tiene
consecuencias ecológicas negativas en las zonas en las que se obtiene. - Aunque no demasiados, aporta algunos nutrientes al terreno.
Fibra de coco.
- Se obtiene a partir de los cocoteros.
- Sus propiedades son similares a las de la turba, pero no tiene apenas nutrientes Además, su uso no tiene tanto impacto ambiental.
Humus de lombriz.
- Es un humus obtenido a partir de restos orgánicos que son procesados por lombrices.
- Es un excelente abono que mejora las propiedades del terreno aportando nutrientes y dando una textura adecuada.
- Es un producto caro.